Andre Dolvonosov, un hombre al borde de un precipicio, decide no saltar al pensar en la imagen de su mujer y su hija desangrándose en un paso de cebra, una helada noche de invierno, tras un atropello con fuga. Andre, quien sufrió malos tratos de pequeño, decide desplegar el conjunto de habilidades adquiridas en su trabajo como asesino a sueldo para una organización de la mafia rusa. Para ello pide ayuda a su antiguo jefe, quien le proporciona los medios e infraestructura necesaria para dar caza y acabar con los dos drogadictos que atropellaron a su mujer y a su hija, y a la abogada que les ayudó a salir indemnes en el juicio.